El presidente Volodymyr Zelenskyy reconoció por primera vez el sábado que las fuerzas ucranianas estaban luchando en la ofensiva sorpresa en Kursk, Rusia, mientras continuaban los ataques en la región fronteriza y las autoridades se apresuraban a evacuar a la gente.
Las fuerzas de Moscú estaban en su sexto día de intensas batallas contra la mayor incursión de Kiev en territorio ruso desde el inicio de la guerra, que dejó vulnerables las zonas del suroeste de Rusia antes de que comenzaran a llegar refuerzos.
En una señal de la gravedad de la situación, Rusia impuso el sábado un amplio régimen de seguridad en tres regiones fronterizas, mientras que Bielorrusia -un firme aliado de Moscú- envió más tropas a su frontera con Ucrania, acusando a Kiev de violar su espacio aéreo.
En su discurso nocturno en video, Zelenskyy dijo que había discutido la operación con el alto comandante ucraniano Oleksandr Syrskyi, prometiendo restaurar la justicia después de que Rusia lanzara la invasión a gran escala contra su vecino más pequeño en febrero de 2022.
“Hoy recibí varios informes del comandante en jefe Syrskyi sobre las líneas del frente y nuestras acciones para llevar la guerra al territorio del agresor”, dijo Zelenskyy.
Las autoridades ucranianas dicen que 14 personas murieron y decenas resultaron heridas en un ataque con misiles rusos contra un supermercado en la ciudad oriental de Kostyantynivka. El ataque se produjo en el cuarto día de un ataque terrestre ucraniano dentro de territorio ruso.
“Ucrania está demostrando que puede restablecer la justicia y ejercer la presión necesaria sobre el agresor”.
El Ministerio de Defensa de Rusia dijo el domingo que había destruido 14 drones ucranianos y cuatro misiles balísticos tácticos Tochka-U durante la noche sobre la región de Kursk, y 18 drones sobre otras regiones rusas que Ucrania ataca con frecuencia.
El presidente ruso, Vladimir Putin, calificó el ataque ucraniano, que según los analistas militares tomó por sorpresa al Kremlin, como una gran provocación.
El máximo general de Rusia, Valery Gerasimov, dijo el miércoles que los ataques habían sido detenidos, pero que Rusia no ha hecho retroceder a las fuerzas ucranianas a través de la frontera.
Los blogueros militares rusos dijeron que la situación se había estabilizado después de los refuerzos de Rusia, aunque dijeron que Ucrania estaba acumulando fuerzas rápidamente.
Heridos y evacuaciones
A primera hora del domingo, funcionarios de Kursk dijeron que 13 personas resultaron heridas en la ciudad después de que los escombros de un misil ucraniano destruido cayeran sobre un edificio residencial de nueve pisos. No estaba claro si hubo más daños.
Moscú y Kiev rara vez revelan la magnitud total de los daños causados por los ataques a ellos, a menos que haya heridos o daños a edificios residenciales.
Alexei Smirnov, gobernador interino de Kursk, ordenó a las autoridades locales acelerar la evacuación de civiles en zonas de riesgo.
El sábado, la agencia estatal de noticias rusa TASS informó que más de 76.000 personas habían sido evacuadas.
Kiev y Moscú niegan haber dirigido sus ataques contra civiles en la guerra, que ha matado a miles de personas y desplazado a millones de ucranianos y no tiene un final a la vista.
Los blogueros militares rusos dicen que los combates se están librando a una profundidad de hasta 20 kilómetros dentro de la región de Kursk, lo que llevó a algunos de ellos a preguntarse por qué Ucrania pudo atravesar la región de Kursk con tanta facilidad.
Después de que un padre y su hijo de cuatro años murieran en un ataque aéreo ruso en la región de Kiev el domingo, el jefe de gabinete de Zelenskyy, Andriy Yermak, prometió más ataques contra la infraestructura militar rusa y dijo que Moscú no acepta “otros argumentos”.
La comisionada rusa de Derechos Humanos, Tatyana Moskalkova, dijo que había enviado un llamamiento a las Naciones Unidas exigiendo que condenaran las acciones de Ucrania en Kursk.
En una publicación de Telegram, Moskalkova dijo que estaba pidiendo al comisionado de Derechos Humanos de la ONU que “tome medidas para prevenir graves violaciones masivas de los derechos humanos”.
