La gran historia de la derrota de los Green Bay Packers por 34-29 ante los Philadelphia Eagles el viernes por la noche no fue el resultado del juego.
Fue la lesión del quarterback estrella Jordan Love, que se produjo faltando cinco segundos para el final del último cuarto. Mientras Love se retorcía de dolor en el campo, parecía una situación que podría alterar la temporada.
Resulta que se espera que Green Bay recupere la piedra angular de su franquicia a tiempo para ser competitivo. Según Adam Schefter de ESPN, se cree que Love sufrió un esguince del ligamento colateral medial que podría dejarlo fuera de juego durante tres o cuatro semanas.