A fabricante de aeronaves Aerobús lidera un proyecto que pretende estudiar las huellas dejadas por aviones impulsado por hidrógeno en el aire durante el vuelo. el proyecto Cóndor azulrealizado a través de la filial UpNext, intenta descubrir qué gases se generan durante el movimiento, si hay diferencia con respecto al combustible principal actual, el querosenoy cuánto afecta esto al medio ambiente.
En marcha desde finales de 2020, Blue Condor se encuentra en su tercera fase.
La primera fase consistió en encontrar todos los componentes tecnológicos y una plataforma voladora que pudiera adaptarse con un sistema de hidrógeno y un motor de combustión de hidrógeno. Además, fue necesario estructurar una operación de persecución de pistas con una aeronave específica para transportar toda la instrumentación necesaria.
La segunda fase del proyecto se dedicó a pruebas en tierra y en vuelo, realizadas hasta noviembre de 2022, para garantizar que el sistema de hidrógeno y el motor de combustión de hidrógeno funcionaran de forma segura y funcionaran según las necesidades. El hidrógeno era el combustible principal en todos.
La tercera y más importante fase es cuando se recopilan los datos. El avión Blue Condor será remolcado por un avión Grob Egrett a una altitud de 33.000 pies (unos 10.000 metros) y luego liberado. Este avión de “persecución” seguirá detrás, utilizando sensores para recopilar y analizar datos atmosféricos y de estelas. Aún no hay datos preliminares.
Según José Días Vides, ingeniero responsable del proyecto, Cóndor Azul fue la forma más rápida encontrada de comprender la formación de las huellas que deja la combustión del hidrógeno. “¿Cuáles serían las implicaciones de esta nueva vía energética? Todo será medido y registrado por instrumentos para detectar lo que sale del escape de los aviones”, resume.
A lo largo del próximo año, sus responsables esperan poder realizar más mediciones y obtener datos completos sobre el tamaño y concentración de los cristales de hielo formados, la temperatura y humedad del aire ambiente, y también sobre qué más sale del escape del motor. , qué partículas pueden estar volando y ayudando a formar estelas de vapor.
Combustible destacado
El hidrógeno se considera una de las principales alternativas sostenibles a los combustibles fósiles. El principal subproducto de la quema de hidrógeno es el agua, pero también se pueden generar óxidos nitrosos, lo que requiere atención.
El hidrógeno se considera principalmente una alternativa para las industrias pesadas.como la aviación, la navegación, la siderurgia y otros con altas demandas energéticas. También se ve como una forma de almacenar energía generada por fuentes intermitentes como la solar y la eólica: la electricidad generada por estas formas se utilizaría para producirla y, así, sería posible garantizar el suministro en épocas sin sol ni viento.
El combustible se puede clasificar en colores según su origen. Por ejemplo, el hidrógeno que proviene de otras fuentes renovables es verde; lo que se produce a partir del gas natural (un combustible fósil) es gris o azul, dependiendo de si el proceso capturó CO2; el tomado directamente de la naturaleza es blanco; los producidos con energía nuclear son de color rosa, si utilizan energía eléctrica, y morados, si utilizan energía térmica.
Para la aviación, el hidrógeno podría ser excelente en términos de rendimiento. “Se puede extraer tres veces más energía por kilogramo que con el queroseno convencional, o también con el SAF”, informa Vides, refiriéndose a un tipo de biocombustible (combustible de aviación sostenible).
Sin embargo, si bien aporta más energía, el hidrógeno también plantea desafíos prácticos. Hoy en día, el queroseno o SAF se almacena en tanques en las alas de los aviones, lo que no funciona con el hidrógeno. Por tanto, sería necesario rediseñar la aeronave para poder utilizarla.
“El hidrógeno es una fuente de energía alternativa muy, muy atractiva. Pero, tecnológicamente, necesitamos desarrollar una nueva forma de almacenar el combustible dentro de nuestros aviones para poder utilizarlo eficientemente y transportarlo de un lugar a otro”, comenta Ver .
Con esta cuestión, también sería necesario aumentar la producción de hidrógeno en todo el mundo para garantizar el suministro a la aviación y otras industrias, lo que regularía el precio y crearía un ecosistema económicamente viable para la exploración. Entonces, aunque es una parte importante del programa de sustentabilidad de Airbus, el combustible es solo una de las alternativas; el SAF es otra alternativa bien considerada.
Según Vides, el fabricante ya está pensando en desarrollar aviones propulsados por hidrógeno: hay tres modelos en diseño, cuyo lanzamiento está previsto entre 2030 y 2035. A su vez, el SAF ya se utiliza en la aviación comercial, solo o combinado con queroseno, aunque en muy pequeña escala.
No Brasil, El marco regulatorio para el SAF fue aprobado en el Congreso. y sancionado, en Proyecto de ley sobre el “combustible del futuro”mientras que el Programa de Desarrollo de Hidrógeno con Bajas Emisiones de Carbono está en el Senado, previa aprobación en la Cámara.
Otros proyectos
Además de Blue Condor, UpNext tiene otros dos proyectos que tienen como objetivo desarrollar tecnología para eliminar las emisiones de carbono de Airbus. Uno es Ascend, que analiza el uso de superconductividad en motores eléctricos para su uso en futuros aviones de hidrógeno como una forma de extraer y transmitir más energía.
El otro tiene como objetivo aumentar el rendimiento de las alas, con tecnologías en prueba para optimizar la dinámica y que son adecuadas para cualquier forma de propulsión y configuración de la aeronave. Con el mejor rendimiento de las alas se espera una reducción de las emisiones de CO2.