La presencia de determinadas proteínas en la orina de las mujeres embarazadas puede ayudar a identificar a aquellas que tienen mayor riesgo de desarrollar problemas cardíacos posparto, indica un estudio difundido este lunes por la Facultad de Medicina de la Universidad de Oporto (FMUP).
El trabajo, que fue publicado a finales de junio en Informes Científicos (Grupo Naturaleza), analizó las proteínas presentes en la orina (proteoma) de 59 mujeres embarazadas, de las cuales 32 estaban sanas y 27 tenían al menos un factor de riesgo cardiovascular. En un comunicado, la FMUP describe que las mediciones se tomaron durante el tercer trimestre del embarazo y seis meses después del nacimiento.
Teniendo en cuenta que el embarazo obliga al cuerpo de la mujer a adaptarse al crecimiento y desarrollo del feto, y que el corazón es uno de los órganos que sufre ajustes, como un aumento de masa del ventrículo izquierdo, el principal objetivo de este El estudio tuvo como objetivo identificar el perfil proteico en la orina de mujeres sin factores de riesgo y con factores de riesgo, a saber, obesidad, hipertensión o diabetes tipo 2 o gestacional.
Entre las 342 proteínas presentes en la orina examinadas, la investigación identificó 17 proteínas relacionadas con cambios cardíacos persistentes después del parto, es decir, con un aumento de la masa del ventrículo izquierdo. Los autores concluyeron que las proteínas identificadas en la orina pueden indicar cómo el corazón se readapta después del embarazo. Algunas de estas proteínas señalan “una recuperación más lenta del ventrículo izquierdo, mientras que otras indican un retorno más rápido a la normalidad”, se describe en la síntesis enviada a Lusa.
Así, estas proteínas podrían funcionar como biomarcadores, reflejando los cambios estructurales y funcionales que ocurren en el corazón durante y después del embarazo, es decir, podrían señalar a las mujeres embarazadas que tienen más probabilidades de desarrollar cambios cardiovasculares, es decir, una remodelación cardíaca incompleta, que parece ser un precursor del desarrollo de enfermedades cardiovasculares a largo plazo. “Este enfoque pone de relieve la importancia de un seguimiento más estrecho de estas mujeres, especialmente después del embarazo”, advierten los investigadores, citados en el comunicado de la FMUP.
Distinguido con el Premio Salud Cardiovascular de la Mujer otorgado por la Sociedad Portuguesa de Cardiología junto con Organon en el Congreso Portugués de Cardiología 2024, este estudio es parte integral del proyecto PERIMYR, una iniciativa que tiene como objetivo profundizar el conocimiento sobre los riesgos cardiovasculares durante el embarazo y el período. posparto.
Participaron de este estudio Inês Falcão Pires, António Barros, Ana Ferreira, Fábio Trindade, Juliana Morais, Sílvia Diaz, Francisca Saraiva, Carla Sousa, Carla Ramalho, Rui Vitorino y Adelino Leite-Moreira, de la FMUP y de la UnIC@RISE/RISE- Salud; Ana Paula Machado, de la ULS de São João; Maria João Azevedo, de la Universidad de Amsterdam y Vrije Universiteit Amsterdam; Thibaut Douché y Mariette Matondo, de la Plataforma Proteómica, Unidad de Espectrometría de Masas para Biología, Institut Pasteur, Université Paris Cité.