José Cardoso, ex asesor nacional de la Iniciativa Liberal, ya había anunciado su intención de crear el Partido Social Liberal (PLS) y, el próximo miércoles, entregará las 7.500 firmas necesarias para la creación de una nueva fuerza política en el Tribunal Constitucional (TC), con la mira directamente apuntada a las elecciones locales. 2025.
“El jueves la prioridad número uno es preparar equipos que puedan preparar candidaturas municipales”, explica a PÚBLICO. Suponiendo que el PLS tiene “las debilidades normales de un partido que recién comienza” y sin querer presentar una meta concreta para acudir a las urnas el próximo año, José Cardoso se fija el objetivo: “Estar [representado] en tantas regiones y municipios como sea posible”, sin ocultar su deseo de presentarse a los concejos de Oporto y Lisboa. “Haremos todo lo posible para estar presentes en estas elecciones”.
Una de las principales consignas que el PLS quiere llevar a las autoridades locales es “la descentralización del país, que no se puede gestionar de forma centralizada”. Para ello, defienden candidaturas uninominales (en lugar de listas), para atribuir “mayor responsabilidad a los electos y mayor poder al pueblo”, crear una “dinámica de personas valiosas en la política local” y “evitar que las pequeñas poderes se conviertan en toma de control”. La “cultura interna del partido es diferente” de la de los demás, considera el ex candidato a la dirección del IL.
El PLS, que aún debe pasar el escrutinio del TC, nació después de que, en enero, José Cardoso abandonara el IL, en ruptura con la dirección de Rui Rocha, quien lo acusa de centralismo. En ese momento ya había admitido la posibilidad de crear un nuevo partido y, en junio, empezó a recoger firmas para llenar un espacio que dice estaba vacío: un partido con un “componente liberal muy fuerte y un componente social muy fuerte”. .
Y, considera, quien ingresa al partido corrobora esta visión. Quienes se unen extrañan el “liberalismo en el PSD” y el “socialismo en IL”, dice. Según sus datos, el 11% de los participantes son antiguos miembros o simpatizantes del IL, más del 20% del PSD y el resto de la sociedad civil.
El PLS quiere ser un partido de gobierno y no un partido de protesta. Para lograrlo, es necesario “formar personas para gobernar, presentar propuestas” en lugar de “decir que nuestra ideología es mejor que otras”, y disponibilidad para “hacer concesiones” y “colaborar”. Por eso, al ser consultado sobre la posibilidad de sumar fuerzas con otras fuerzas en los gobiernos locales, José Cardoso asume que, “si hay proyectos que realmente quieran hablar de descentralización del poder, educación, salud”, el partido está “disponible”. debatir”.
“No vamos a defendernos”, subraya, añadiendo que “el partido puede que sólo dure tres años”, pero si consigue “despertar a la población” y demostrar que “no hay que ser socialista para ser social”, “sería una gran victoria”.