Funcionarios de inteligencia estadounidenses emitieron un comunicado el lunes confirmando que Irán estaba detrás de los intentos de piratería de cuentas de correo electrónico afiliadas al personal de las campañas presidenciales del presidente Joe Biden y Donald Trump. Los piratas informáticos que pudieron obtener información de la campaña de Trump intentaron divulgar parte de la información a través de medios de comunicación como Politico, pero no lograron publicar el contenido de esos correos electrónicos. La campaña de Biden no fue infiltrada, aunque aún no están claros los detalles sobre por qué Irán fracasó en esos intentos.
La Oficina del Director de Inteligencia Nacional (ODNI), la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) y la Agencia de Seguridad de Infraestructura y Ciberseguridad (CISA) publicaron un declaración conjunta sobre los intentos de piratería informática, diciendo que Irán “busca avivar la discordia y socavar la confianza en nuestras instituciones democráticas” y tiene un “interés de larga data en explotar las tensiones sociales” dentro de Estados Unidos.
“Hemos observado una actividad iraní cada vez más agresiva durante este ciclo electoral, que involucra específicamente operaciones de influencia dirigidas al público estadounidense y operaciones cibernéticas dirigidas a campañas presidenciales”, se lee en el comunicado.
La campaña de Trump había señalado previamente con el dedo a piratas informáticos iraníespero esta es la primera vez que funcionarios estadounidenses identifican al culpable. Y aunque el comunicado decía que la intención era “influir en el proceso electoral estadounidense”, los detalles aún son escasos.
En general, se cree que Irán ha tratado de dañar la campaña del ex presidente Trump como represalia por el asesinato de Qassem Soleimani, un alto general iraní del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica en un ataque con aviones no tripulados en el Aeropuerto Internacional de Bagdad en Irak. Trump se enfrentó a Irán repetidamente durante sus cuatro años en el cargo, incluso al retirarse de un acuerdo de paz en 2018 que finalmente hizo que el país continuara desarrollando armas nucleares. Irán no tiene actualmente una bomba nuclear, pero los informes de noticias estadounidenses siempre dan la impresión de que están continuamente a punto de construir una.
El FBI ha sido la agencia líder en la respuesta a los intentos de piratería y continúa recopilando datos, según el comunicado.
“No toleraremos esfuerzos extranjeros para influir o interferir en nuestras elecciones, incluido el ataque a campañas políticas estadounidenses”, dijeron las agencias el lunes. “Como interagencia, estamos trabajando estrechamente con nuestros socios del sector público y privado para compartir información, reforzar la seguridad e identificar y desbaratar cualquier amenaza”.
La declaración instaba a todos los estadounidenses a utilizar contraseñas seguras y sólo cuentas de correo electrónico oficiales para asuntos oficiales. Las agencias también enfatizaron lo importante que era actualizar continuamente el software y evitar hacer clic en enlaces o archivos adjuntos de correos electrónicos sospechosos.